Desde el Arciprestazgo del Valle

Retablo de Villarrodrigo

Cuando llega el invierno en nuestros pueblos son muchas cosas las que nos lo hacen sentir: más frío, menos horas de luz... los pueblos se encogen por ello y por que se nos marchan un número importante de gente que en buen tiempo vuelven. Todo esto marca la vida y el ritmo de los pueblos. Pero eso no quita que cuidemos cómo vivir la Navidad.

En toda nuestra comarca nos hemos reunido para rezar y reflexionar sobre el sentido del adviento en nuestros pueblos hoy. Y cada semana a la vez que encendemos una vela más, hemos preparado juntos la celebración de estos cuatro domingos de adviento y hemos sacado unas hojillas que nos ayudan a rezar y reflexionar, junto con un cartel que nos centra en este camino de preparar la Navidad.

No queremos que se nos pase hacer un hueco a los necesitados en nuestra navidad y cuidamos el gesto del compartir con aquellos que no tienen en una campaña que llevamos muchos años haciendo. Compartir con los que no tienen.

Hemos preparado una felicitación para todas nuestras comunidades cristianas, para felicitarnos la navidad y que no se nos olvide todo el significado que tiene para nosotros los creyentes.

Se cuida además que no haya un pueblo sin su pequeño o gran belén, en muchos casos hecho con la participación generosa de un grupo de gente que durante días lo ha estado preparando.

Una cosa más es la ya tradicional velada comarcal de villancicos que se celebra en el centro de nuestra comarca, en Saldaña. Donde participan los distintos grupos corales musicales, más o menos profesionales, pero con una ilusión grande todos. Junto a esto se va haciendo habitual el reunirse todo el pueblo en comidas como la matanza, o con un chocolate y una película navideña.

La Navidad es algo entrañablemente bonito porque vemos como Dios se acerca a lo sencillo y vive en lo humilde, y le sentimos muy cerca en los pueblos pequeños muchas veces olvidados, en el anciano y en el pobre... Feliz Navidad.

Luis Ángel Roldán (Arcipreste)